Para la muestra otro botón: Nutrición y Dietética

La crisis de gobernabilidad al interior de la Universidad del Atlántico acaba con la tranquilidad de un estudiantado que desea dedicarse plenamente a sus estudios contribuyéndole al crecimiento de su institución.


¿Un licenciado en biología decano de Nutrición y Dietética? Parece una broma pero no lo es. Esto resulta una seria ofensa contra todos los miembros de la comunidad universitaria presentes en dicha facultad que tienen que ver con impotencia cómo una dignidad tan grande en el mundo académico le es entregada, en este caso, a alguien ajeno a sus procesos. Mas esta insensatez no resulta nueva, es solo un “botón” más para la “muestra” de que en nuestra universidad existe una crisis de gobernabilidad.

Año y medio sin un rector en propiedad, más de la mitad de los decanos rondando los diez años en sus cargos, encargos de decanaturas que se han vuelto vitalicios, desconocimiento de la voluntad de los estamentos universitarios en decisiones fundamentales como el presupuesto del presente año, entre otros hechos que han convocado a el estudiantado de la gloriosa “UA” a salir en defensa de la misma y de la excelencia académica, son la muestra más evidente del fracaso del modelo de gobierno de las universidades públicas. Un modelo antiacadémico, excluyente, autoritario, antidemocrático, politiquero, corrupto… ¡En fin! Un modelo antiuniversitario que sistemáticamente va convirtiendo a nuestra Alma Mater en una chequera en blanco para los reconocidos bandidos que la acechan, o para  ser más propio, para los miembros del Consejo Superior que se la reparten a su antojo.


Si usted es uno de los que acostumbra a decir “siempre es la misma vaina con esa universidad”, sepa que tiene tota la razón, pero el problema no somos los estudiantes ¡no son los vagos! ¡ni los “sin oficio”!  El problema radica en ese sistema construido y defendido por los gobiernos de turno a través del Ministerio de Educación Nacional con la participación de las directivas que el mismo va estableciendo. Nosotros siempre hemos luchado por el derecho a construir, entre todos, una universidad para todos. La autonomía y la democracia universitaria siempre han sido consignas del movimiento estudiantil y del estudiantado en general. ¡Creemos que tenemos derecho a erigir nuestros propios destinos como comunidad universitaria! Y un paso ineludible para alcanzar esa meta, sin duda alguna, es reformar los estatutos que rigen la vida universitaria actualmente (lo que algunos hemos llamado la Constituyente Universitaria), de esa manera acabaríamos de raíz con ese problema que nos mantiene en la incertidumbre e inestabilidad institucional y con el avance de la U embolatado.

No debemos expresar una simple solidaridad con los compañeros y compañeras de la facultad de Nutrición y Dietética. Ellos están llevando una lucha que es de todos. Ya la enfrentó Ciencias Económicas e Ingeniería el semestre pasado y otras facultades anteriormente, y la seguirán librando el resto a medida que pase el tiempo. Debemos concientizarnos, y concientizar a toda la comunidad universitaria, de que este es un gran obstáculo estructural y que por ello se hace necesario efectuar esos cambios, llevar a cabo esa constituyente universitaria para darnos nuestro verdadero lugar en la U.

No podía finalizar sin antes felicitar la valentía y la entereza de los compañeros de la facultad de Nutrición y Dietética, una de las facultades más invisibilizadas de la U, hoy demuestran que sí tienen el valor para emprender la defensa de la misma y para hacerse escuchar. Además de que colocan nuevamente en boca de todos, la discusión sobre qué es lo que está pasando realmente en la U.

¡Vamos por nuestra Constituyente Universitaria con democracia y autonomía!


*Por Eloy Soto Rivero. Miembro de la dirección local de la FEU-Atlántico.




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